El Karate Do y los niños en nuestra escuela.
Por Sensei Hugo Briones.
El Karate-Do de la Asociación Japonesa, es un Arte Marcial destinado al desarrollo del carácter y la nobleza a través del entrenamiento práctico, de tal forma que el practicante quede capacitado para superar cualquier obstáculo , no siendo su objetivo final el de vencer a un adversario, sino la formación del individuo.
El Karate-Do es una disciplina consagrada a la autodefensa que se ejecuta con las manos vacías y el cuerpo desarmado. Los brazos y las piernas se adiestran sistemáticamente para conseguir que el ataque lanzado por sorpresa por un enemigo pueda ser controlado efectivamente con una demostración de potencia tan grande como empleando armas reales.
El adiestramiento bien orientado transforma las diversas partes del cuerpo, en armas eficaces, capaces de llevar la agilidad y velocidad de un felino, a la vez que la fuerza y contundencia para vencer a un oponente que le doble en peso y talla. La calidad exigida se obtiene con el autocontrol.
Si bien el Karate-do es uno de los métodos más efectivos y sistemáticos de ataque y defensa que existen en el mundo, el fin de este no es la victoria en el combate, sino su meta final es que el hombre logre su perfeccionamiento con un entrenamiento sistemático y racional, que lo lleve a perfeccionar no solo la técnica deportiva, sino, sobre todo su equilibrio interior.
Por tal motivo, es muy importante la concentración mental que debe estar presente en todo momento, logrando también rigurosa disciplina psíquica y un potenciamiento de las fuerzas físicas.
A los aspectos positivos de la competición: motivación, seguridad en si mismo, decisión etc., hemos de añadir otros elementos:
Diversos estudios muestran la relación que hay entre el movimiento y el equilibrio de la personalidad. Al observar las técnicas de los Kata es fácil encontrar situaciones en las que se ejercitan todo tipo de habilidades motoras, (coordinación, equilibrio, agilidad etc.) Asimismo los ejercicios por parejas requieren el perfecto control de los conductos perceptivos. (Sincronización, ritmo, etc.)
Frecuentemente vemos niños que pasan de ser tímidos, agresivos o poco sociables, a ser niños que encuentran en el dialogo corporal que es el Karate, la forma de conocerse a si mismos, de canalizar su energía y de integrarse en el mundo que les rodea.
Lo anteriormente expuesto cobra especial significado en la competición, donde el alumno mostrara un Kata o realizará un Kumite desplazándose, bloqueando, atacando o contraatacando, el niño expresara su vivencia e ilusión por el trabajo realizado y los conocimientos transferidos por el Sensei.
EL BENEFICIO EN LOS NIÑOS (AS)
El karate es una de las disciplinas que mas puede contribuir en el proceso de formación de los menores, ya que desarrolla tanto su estado físico como emocional, mejorando de manera considerable su rendimiento escolar y su relación con los que le rodean.
Su práctica ejercita la concentración creando hábitos que le ayudarán en sus estudios y en el trabajo.
Da confianza y seguridad haciéndole sentir más seguro de sus posibilidades en diferentes soluciones de la vida cotidiana.
Genera respeto y educación, haciéndole más comprensivo hacia los otros, creando actitudes positivas ante la sociedad.
Lo mantendrá en forma, cuidando su peso y alimentación, dando a su cuerpo la flexibilidad y los estímulos que mejoran su estado físico, reflejos y motricidad que favorecerán su desarrollo.
La categoría de Karate Infantil incluye a los alumnos entre los 7 y los 14 años de edad, edades en las que cabe diferenciar un tratamiento especial en la enseñanza del Karate-Do.
La labor dentro de estos años en que un profesor puede aportar a la formación humana del niño o niña presenta caracteres muy positivos, tanto en el campo de los valores colectivos (Integración en el grupo, compañerismo, respeto mutuo), como individual (emulación, superación, esfuerzo), aunando a estas características internas un desarrollo físico equilibrado en el que se ejercita todo el organismo a manos libres y con igual intensidad.
Considerando al niño como un individuo en plena evolución, la practica del Karate-Do es escalonada, combinada con ejercicios-juegos iniciales con el subsiguiente trabajo teórico-práctico que le permite abordar las etapas siguientes, con el conocimiento técnico necesario, para poder valorar sus progresos lo cual lo lleva a continuar con agrado en el aprendizaje de esta disciplina.
El primer paso de la enseñanza se alcanza en una combinación de respeto y juego sumando a ellos un aprendizaje inicial de la técnica de un modo informal que rompe la frialdad del niño, junto con el ejercicio físico, va fundamentando los conocimientos básicos del Karate-Do.
Esta etapa inicial estará encaminada a favorecer la aptitudes naturales del niño, de una forma progresiva y acorde a su desarrollo psicofísico, el Karate-Do, les ayuda a desarrollar personalidad y seguridad en si mismo, a conocer sus potencialidades aún no descubiertas. Armoniza los ejercicios físicos con normas morales y disciplinarias que ayudan a la formación integral de la niñez.
El aporte que un Arte Marcial como el Karate puede hacer a nuestra estructura corporal es grande. Por ello, las primeras etapas de nuestra vida son las mas idóneas para iniciarse en el actividad física, ya que favorece en gran medida el desarrollo psicomotor del infante y lo prepara para acceder a otros aprendizajes superiores.
La práctica del Karate desde la infancia puede por ejemplo, y desde el punto de vista físico, prevenir o ayudar a corregir ciertas alteraciones de la columna vertebral. Los ejercicios en posición erecta y equilibrada con entrenamiento de músculos de la espalda y de sostén, hacen rectificar o frenar la formación de estas posturas viciosas.
El karateka infantil no solo verá mejorado su rendimiento físico si no que irá forjando su espíritu en la disciplina y el desarrollo de una voluntad férrea de trabajo que le acompañara toda su vida.
EN SINTESIS:
- Estimula el crecimiento y endurecimiento de los huesos (en adultos disminuye el riesgo de osteoporosis).
- Favorece el desarrollo psicomotor de las menores.
- Favorece el aumento de resistencia corporal (por el estímulo continuado que supone para la bomba cardiaca el entrenamiento constante), así como el desarrollo de la fuerza y la potencia máxima.
- Favorece el desarrollo de la personalidad y la auto confianza.
- Sirve como método de cultura física y autodefensa.
- Retrasa el inevitable declive físico y psíquico que supone la edad (recordemos que es “una forma de vida “y de ver la vida y no solo un deporte, además potencia las fuerzas físicas mentales).
Programa de Trabajo
Para niños y niñas de 4 y 5 años de edad.
Unidad A : TRABAJO FISICO
- Caminar
- Trotar
- Correr
- Movilidad Articular
- Elongación
- Rebotes
- Juegos
Unidad B : TECNICAS Y POSICIONES (KIHON)
- Posiciones
- Seisa dachi – Musubi dachi – Hachiji dachi – zenkutsu dachi.
- TECNICAS TREN INFERIOR
- Mae Geri Keage
- Gedan Barai ( ura )
- TECNICAS TREN SUPERIOR
-
- Oi-zuki
- Gjaku-zuki
- Mae enpi uchi
- Jodan Age Uke
Unidad C : FORMAS TRADICIONALES (KATA)
- Forma pre-básica
- Kata Fundamental
Unidad D : CONTROL DE PRESICION
- Golpes sin contacto ( Marcación )
-
Zuki y Geri con control
Unidad E : COMBATE BASICO (KUMITE)
- Pactado de cinco ataques
- Jodan zuki – jodan age uke y gyaku-zuki
Unidad F : DEFENSA PERSONAL
- Defensa contra tomada de solapas
Unidad G : FUNDAMENTOS FILOSOFICOS
OBJETIVO FUNDAMENTAL